top of page
Foto del escritorCruces x Rosas

Educación sexual para decidir

Actualizado: 4 feb 2023

Los derechos reproductivos, garantizan una niñez basada en el amor

Por Raizoae

Nuestros derechos reproductivos, protegen las infancias basadas en el deseo de criar. Me explico con un ejemplo de Sename* (recinto en Chile para menores de edad en situación de abuso, abandono, violencia, etc.) A este lugar, no solo llegan bebés abandonadas/es/os, también llegan niñas/es/os que son violadas/es/os sus propios padres, primos, tíos. Criadores con conductas sádicas hacia ellas/es/os ejerciendo tortura hacia sus crías.

En un estudio que realizó la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) se notificaron miles de desapariciones de personas internadas en el Sename. Entonces la pregunta que nace es:

¿ Para qué obligar a personas gestantes a parir?

Cómo cuidamos nuestras primeras etapas de la sociedad a través del no-deseo? Sin voluntad ni ánimos? En situaciones de supervivencia que no permiten la dedicación?

 Pienso que una persona al embarazarse, debería responder sinceramente si desea ejercer una labor comprometida de crianza. Y esta misma pregunta también debería ser respondida por la persona que fecunda. Y si la respuesta es no, como sociedad ayudarles, contenerles, protegerles en la decisión de no ejercer una difícil labor de crianza, y entregarse a la precariedad. Parir, debe ser una decisión conjunta, entusiasta, con-sentimiento.

Hay estudios (En un video de ‘en pocas palabras’ en YouTube) que demuestran el aumento de natalidad, al aumento de pobreza y entorpece el crecimiento profesional de las mujeres.

Como sociedad no estamos comprometidas/es/os con el progreso y el bienestar de todas las personas, Yo lo que veo es un ánimo totalitarista de imponer ideas que aún no se quiénes benefician, aún no entiendo para qué exigir a personas parir para después dejar en una situación de abandono y desesperación a las mismas. Todo lo relacionado a lo sexual, está expuesto a una postura sometedora a nuestros deseos y responsabilidades. Las ideas judeocristianas sitúan a la sexualidad en un lugar en donde el silencio oprime, provoca ignorancia y cultiva culturas que satanizan lo hermoso de interactuar sexualmente, la importancia de expresar y vivir nuestros deseos con afectividad, el compromiso que requiere la crianza.

Los derechos reproductivos, garantizan una niñez basada en el amor.

El goce y el placer, es algo intersubjetivo, personal y casi inconsciente, en la interacción sexual no habita la palabra, y cada cuerpo expresa su lenguaje instintivo que entrega y busca placer, como una danza. Esto no se puede medir, ni fiscalizar, el placer se condensa de las garantías del derecho sexual. En la educación emocional, sexual, género y social, debería estar incluida la autoexploración, incluso antes de interactuar por primera vez con alguien, es nuestra responsabilidad conocer nuestro placer, así como nuestro bienestar y alegría, de ahí nacen nuestras necesidades y límites que permiten el equilibrio.

Ahora, como es inter-subjetivo, lo que es inter, son los constructos o imposiciones sociales, si el placer está asociado a la culpa a través de la espiritualidad o educación formal, impide la plenitud del goce sea sexual, ocio, hobbies, etc. Sin placer, seríamos máquinas no-sintientes, herramientas para producir. Bueno al ser herramientas ajenas o culposas al placer y al goce, podríamos especular a quién beneficia esta lógica productiva no-sintiente: servir sólo para producir materias primas y parir sin preocuparnos de nuestra autonomía económica, vocacional, espiritual, afectiva y del goce. Aún peor, asociar nuestro placer a culpas  que terminan en actitudes auto- flagelantes, o proyectivas- agresivas, como proponen las ideas judeocristianas a nuestro placer.

 La educación sexual, debe contemplar habilidades emocionales y sociales, para aprender a confiar entre nosotras/es/os, para comunicarnos y apreciarnos, desde ahí nos hará sentido colaborar y cuidar nuestra sociedad. También debe contemplar aspectos sexuales de identidad de género, orientación sexual y aspectos biológicos, esto favorece que estemos en coherencia con nuestros deseos. Nuestra identidad constituye nuestra participación e integración social y cómo nos identifican y queremos Ser identificadas/es/os. 

Construir una identidad social, basada en la represión de nuestra sexualidad, es construir una sociedad que reprime sus deseos- voluntades, lo cual es base de algunas desadaptaciones mentales y emocionales. Podemos ver las estadísticas latinoamericanas sobre estrés, ansiedad y depresión. Solo el privilegio te permite vivir en deseo y voluntad.

Por otro lado, y aún más relevante, que nuestras/es/os niñas/es/os puedan poner en palabras acciones sexuales  previene los casos de abuso sexual o permite pedir ayuda de manera oportuna, debido a que la manipulación adulta se puede ver frustrada ante el conocimiento de un/a/e niño/a/e que comprende lo que ocurre en casos de abuso. La educación sexual integral, previene abusos sexuales, garantiza la oportuna ayuda, favorece los lazos emocionales y cohesión social, promueve el respeto, protege nuestros deseos, previene suicidios y homicidios de género y por discriminación, nos une como un colectivo.

Los derechos de la humanidad buscan garantizar la dignidad de las personas, un Buen Vivir. Si nuestro cuidado social, no parte por nuestras relaciones, tendremos herramientas intentando sobrevivir sin sentido propio ni aprecio por su entorno ni cercanos, insisto en que ninguna espiritualidad debe estar estar contra del bienestar social.

La crianza solo ante el deseo y voluntad, sino, seguiremos sometidas ante el deseo de otras/es/os, y viviremos como herramientas de un sistema que no nos permite Ser.

Raizoae es escritora, asesora relacional fenomenológica y activista. Recientemente se unió al staff de Blogueras de CrucesxRosas. ¿Te gustaría colaborar con nuestro Fanzine? Escríbenos a crucesxrosas@gmail.com

¿Quieres saber más sobre el Sename? Lee el reportaje de Ciper aquí

9 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page